Ya tienes tachado de tu lista de pendientes de tu boda varias cosas importantes como el restaurante, la fecha y el fotógrafo. Una vez contratado esto, empieza lo divertido. Ahora toca elegir vestido de novia.
Es la parte más esperada por todas las novias, la que más dudas trae. Si te casas en 2020 ahora es una fecha estupenda para elegir el vestido. Como ya te comenté hace unas semanas en este post, las colecciones están recién salidas del horno. Y tendrás más variedad para elegir.
Te dejo una serie de tips para que este paso sea lo más divertido posible.
1. Fíjate un presupuesto.
Muchas novias a las que le pregunto sobre el tema me comentan.
“Yo no me fijo en el precio, solo que me sienta especial”
¿Seguro?
En una misma tienda pueden mostrarte vestidos de 900 euros y vestidos de mas de 10.000 euros.
Las marcas suelen trabajar distintas submarcas según precio. Y hoy en día, existen muchas tiendas multimarca. Lo cual te facilita la búsqueda, pero también te puedes encontrar alguna sorpresa.
Es muy probable, que la chica que te atienda el día que vayas a probarte, te pregunte este dato nada más empezar. No te mostrarán vestido que se pase mucho de tu limite (aunque siempre te darán alguno que se pase ligeramente).
2.Ojea la temporada antes por internet.
Internet hace magia, y todo está ahí. Dedica esos ratos muertos de domingo a mirar las colecciones en el catálogo online, y podrás descartar modelos o marcas sin tener que perder tiempo físico en una tienda.
3.Elige quien te acompaña con cabeza fría.
¿Has visto alguna vez algún programa de vestidos de novia?
Una de las cosas que más me llama la atención es los presupuestos que tienen en ocasiones.
Otra situación que me parece muy “loca” es ir con un regimiento de personas a verlos.
La suegra, la tía, la madre, las hermanas, el padre, el hermano, la compañera de trabajo, las damas y la peluquera.
Seguro que a ti también te ha llamado la atención eso. Y sobre todo lo que suele pasar a continuación.
La novia lo pasa mal. Ver vestidos se convierte en un calvario. Todos opinan y critican. Y futura esposa, cada vez se siente peor. En ocasiones tienen que llevarse a la novia en privado y salir con “Este es el elegido”.
Los americanos lo hacen todo en grande, pero sinceramente, no es algo que se deba copiar.
Así que elige bien a que personas vas a llevar. Que conozcan tus gustos, el tipo de boda… y sobre todo que sepan respetar tus decisiones. Este proceso, con las personas idóneas, será una experiencia única.
4.¿Tienes claro algo para ese día? Llévalo.
En muchas ocasiones hay algún detalle familiar o con especial cariño que quiere lucir ese día. Unos pendientes, una gargantilla…
En este momento deberías llevarlo. Así desde un principio podrás ver como queda, o simplemente descartar esa idea de usarlo con convicción, desde un comienzo.
Si tienes algún modelo de vestido en concreto que quieras probarte, coméntaselo a la dependienta desde un principio. Así descartar ese vestido si no te queda como piensas, será el primer paso.
5.No agobio – no estrés.
Es común escuchar “soy tan complicada que no encontraré vestido nunca”.
Eso no lo piensas, hay millones de vestidos ahí fuera. Tómatelo como un juego, no tienes que ganar a nadie eligiendo vestido el primer día.
Disfruta de todo el proceso. Si tienes que ir a 5 tiendas, pues nada, vas.
Si te tienes que probar 30 vestidos, pues lo haces.
Posiblemente no disfrutes de esa experiencia en mucho tiempo (si es que lo vuelves a experimentar).
El ultimo punto es el más importante sin duda.
Disfrutar de este paso es clave. Ya que te hará llevar todo el proceso de forma más relajada.
¿Cuántos vestidos te has probado tu?